Hotel Casa da Balea Corcubión, Corcubión

El hotel tiene una ubicación excelente, permitiendo una caminata corta hasta Finisterre. Las habitaciones son muy bonitas y cómodas, aunque el precio es un poco elevado y solo aceptan efectivo. El servicio es amable y acogedor, pero hubo un inconveniente con la calefacción. En general, es un buen lugar para descansar tras el camino, pero la selección gastronómica podría mejorar.

El hotel tiene una ubicación excelente en el Camino de Santiago, lo que permite una corta caminata final hacia Finisterre. Las habitaciones son hermosas y muy cómodas, pero me faltó un poco más de hospitalidad en el servicio. Aunque el precio es razonable, la experiencia gastronómica podría mejorar con más opciones, ya que el desayuno no empezó hasta más tarde.

El hotel está muy bien situado, justo en el camino de Santiago y con un ambiente tranquilo. Las habitaciones son bonitas y muy cómodas, aunque puede hacer bastante calor durante la noche. El personal es extremadamente amigable y servicial, lo que hace que la estancia sea mucho más agradable. Sin embargo, el desayuno comienza un poco tarde para quienes tienen planes temprano. En general, es una buena relación calidad-precio, pero el aire acondicionado podría mejorar.

El hotel está ubicado en un lugar tranquilo y pintoresco, perfecto para quienes buscan relajarse. Las habitaciones son cómodas y cuentan con un balcón privado desde donde se puede disfrutar de una hermosa vista al mar. El servicio es cálido y acogedor, aunque el desayuno podría tener más opciones. En general, es una buena relación calidad-precio, pero la conexión Wi-Fi no estaba incluida, lo que fue un poco inconveniente.

El hotel tiene una ubicación tranquila justo en el Camino de Santiago, lo que facilita un corto paseo final hacia Finisterre. Las habitaciones están bien, con una vista al mar impresionante, aunque un poco costosas y solo se acepta efectivo. El servicio fue amable y servicial, pero la calefacción se apagó antes de que llegáramos. En general, ofrece una buena experiencia, pero hay áreas que podrían mejorar.

El hotel tiene una ubicación espectacular, justo en el Camino de Santiago y con buenas opciones de restaurantes cercanos. Las habitaciones son hermosas y muy cómodas, lo que nos permitió disfrutar de una botella de vino mientras contemplábamos la maravillosa vista al mar. Sin embargo, la temperatura en la habitación era un poco alta para dormir bien. El servicio fue excepcionalmente amable y servicial, pero el desayuno podría tener más opciones. En general, creo que este lugar ofrece una buena relación calidad-precio.

El hotel está en un lugar ideal, justo en el Camino de Santiago, lo que lo hace perfecto para una parada antes de llegar a Finisterre. Las habitaciones son muy cómodas y cuentan con un balcón donde disfrutamos de una botella de vino con una vista espectacular al mar. Sin embargo, el precio es algo elevado y solo aceptan pagos en efectivo, lo que puede ser incómodo. En general, es una buena opción para descansar y disfrutar del entorno.

El hotel tiene una ubicación excelente, justo en el Camino de Santiago y cerca de buenos restaurantes. Las habitaciones son preciosas y muy cómodas, aunque faltó un poco de hospitalidad. El desayuno es abundante, pero podría mejorarse con más opciones. En general, el servicio es encantador y muy acogedor, lo cual hace que la experiencia sea bastante agradable. Sin embargo, los precios son un poco altos y solo aceptan efectivo.

El hotel tiene una ubicación espectacular, justo en el Camino de Santiago y cerca de buenos restaurantes. Las habitaciones son limpias y cómodas, aunque en mi estancia la temperatura fue bastante alta, lo que dificultó un buen descanso. El servicio fue excepcional, con un personal muy amable y servicial. Sin embargo, el área de comedor podría mejorar con más opciones en el menú. A pesar de estas pequeñas desventajas, definitivamente considero que ofrece una buena relación calidad-precio.

El hotel tiene una ubicación fantástica, justo en el Camino de Santiago y cerca de buenos restaurantes. Las habitaciones son muy cómodas y ofrecen una vista al mar impresionante. Sin embargo, la temperatura en la habitación era demasiado alta para dormir bien, lo que nos llevó a disfrutar de un vino en el bar de confianza mientras admirábamos la vista. El servicio fue excepcionalmente cálido y acogedor. El desayuno fue bueno, pero podría haber empezado un poco antes.